Por qué cada vez es más difícil contratar personal y qué pueden hacer las PyMEs

Cada vez más empresarios y empleadores argentinos expresan la misma preocupación: cuesta contratar gente y aún más retenerla. Acordar una entrevista y que la persona no se presente, o contratar a alguien que al poco tiempo deja de asistir sin avisar, se ha vuelto parte del relato cotidiano de muchos. Aunque puede parecer una situación aislada o anecdótica, lo cierto es que este fenómeno responde a una serie de factores estructurales, culturales y económicos que afectan al mercado laboral, y especialmente a la población joven.

La realidad del mercado laboral en cifras

Según datos de ManpowerGroup Argentina, el 68% de las empresas tiene dificultades para cubrir vacantes, debido a la escasez de talento calificado. Esta cifra se incrementa aún más en sectores como energía (78%), telecomunicaciones (76%) y salud (70%).

Pero el problema no solo es técnico. Una encuesta de Bumeran Argentina (2023) reveló que:

• El 33% de los candidatos jóvenes no se presenta a entrevistas laborales agendadas.

• Un 22% renuncia a los pocos días de comenzar un nuevo empleo, muchas veces sin mediar explicación.

• El 38% de las empresas consultadas dijo haber perdido al menos una contratación reciente por falta de compromiso o motivación del nuevo empleado.

Estas cifras ilustran una desconexión creciente entre las expectativas de los jóvenes y las condiciones que ofrecen muchas organizaciones.

¿Qué está pasando con los jóvenes?

Diversos estudios y voces expertas coinciden en que estamos ante un cambio de paradigma:

🔹 Nuevas prioridades: Los jóvenes valoran más la flexibilidad, el equilibrio vida-trabajo, el propósito del trabajo y las oportunidades de desarrollo, que la estabilidad a largo plazo.

🔹 Desconfianza en el sistema tradicional: Muchos crecieron en un contexto de crisis recurrentes, inflación, precariedad e informalidad. Esto genera desmotivación hacia estructuras jerárquicas rígidas o empleos poco atractivos.

🔹 Mentalidad emprendedora y freelance: Con el auge de la economía digital, el trabajo remoto y las plataformas de servicios, cada vez más jóvenes apuestan por emprendimientos personales o por trabajar para el exterior, cobrando en dólares o euros.

🔹 Desinformación o falta de educación laboral: En algunos casos, no se comprenden las responsabilidades ni se desarrollan habilidades blandas necesarias para ingresar al mercado formal.

¿Qué pueden hacer las empresas?

Ante este escenario complejo, muchas organizaciones están adaptando sus estrategias para atraer y retener talento joven. Algunas posibles soluciones:

1. Revisar el proceso de selección

• Agilizar los tiempos entre entrevista y contratación.

• Utilizar herramientas de selección más dinámicas (videollamadas, tests interactivos).

• Aplicar una evaluación más cultural y de valores que meramente técnica.

2. Ofrecer condiciones laborales atractivas

• Incorporar opciones de trabajo híbrido o remoto cuando sea posible.

• Brindar horarios flexibles o por objetivos.

• Implementar beneficios no económicos, como días libres, formación o mentorías.

3. Invertir en capacitación

• Muchas veces, no se trata de encontrar al candidato perfecto, sino de formarlo internamente.

• Desarrollar programas de onboarding bien estructurados, con acompañamiento durante los primeros 3 meses.

• Estimular el crecimiento profesional dentro de la empresa para generar sentido de pertenencia.

4. Fomentar un buen clima laboral

• Crear ambientes inclusivos, colaborativos y con feedback constante.

• Reconocer los logros, promover espacios de escucha y participación.
  
  

5. Revisar las expectativas internas

• No esperar la misma lealtad y trayectoria que generaciones anteriores.

• Adaptarse a un modelo más flexible, de proyectos y roles cambiantes.

• Medir resultados por impacto y no solo por permanencia.
  
  

Contratar y retener personal en Argentina, especialmente jóvenes, se ha convertido en un desafío que exige repensar la cultura organizacional. No alcanza con ofrecer un empleo, es necesario construir propuestas de valor atractivas, humanizadas y adaptadas a los tiempos actuales.

Las empresas que logren comprender este nuevo contexto y actuar en consecuencia tendrán mayores probabilidades de mantenerse competitivas y contar con equipos comprometidos, motivados y alineados con sus objetivos.

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